No se lo van a creer. ¿Se acuerdan del hotel Princesa Yaiza, ese que citó el País por no tener licencia? Sí, ese mismo hotel que mandó un comunicado de prensa hace unos días exigiendo la dimisión del consejero de Centros Turísticos del Cabildo por haber contribuido a dar una mala imagen de la isla.
Pues resulta que el hotel, propiedad de la archiconocida Rosa Nostra, ha sido denunciado porque lleva años vertiendo porquerías al mar, o dicho en las refinadas palabras del técnico inspector de Salud Pública del Área de Salud de Lanzarote, “continúan existiendo graves problemas de vertidos a pozos muy próximos a la costa y sometidos a la influencia de las mareas, así como en abundantes ocasiones vertidos directos a los barrancos, a la costa y que en ocasiones desembocan en las playas”.
Por su parte, la inspectora de Salud Pública del Gobierno de Canarias en Lanzarote alertó del “peligro sanitario debido a la existencia de numerosos pozos de captación para producción de agua para consumo humano y numerosos pozos de vertidos de aguas, que en muchos casos son aguas residuales brutas”, por lo que requería la actuación urgente de los organismos competentes.
Así que seguimos recopilando datos sobre el hotel Princesa Yaiza:
- Se construyó con una licencia ilegal, hoy anulada.
- El 25% del coste de su construcción lo pagamos entre todos, a través de las subvenciones que recibió de la Unión Europea para “zonas deprimidas”.
- Tiene contratado a Alejandro Morales, “el fantoche de la noche”, para invitar a famosetes al hotel y vender “reportajes periodísticos imparciales” con mucho glamour.
- Y su propietario es socio mayoritario de una televisión local en la que sus peleles mediáticos defienden sus vergüenzas y que, casualidades de la vida, al igual que el hotel también se dedica a echar mierda por los cuatro costados.